Somos los únicos miembros de una sociedad secreta. Son preciosos nuestros besos. Aunque nadie deba verlos y es lo que mejor hacemos.alargarnos la sonrisa,
sacudirnos la distancia
y poder burlar al tiempo...
No puedo ser otra cosa que lo que soy. A estas alturas, no me queda más remedio que admitirlo. Igual que tú.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario